Poemas de Solo la luz alumbra (Sección III)
de Manuel Lopez Azorín
"Un verso, el de Manuel López Azorín, casi siempre desnudo y carente
de artificio, trémulo y valiente, eficaz y conciso, que transmite verdad,
emoción y sentimiento, que evoca mundos perdidos y realidades encontradas, que
desemboca de forma alborozada en el vasto océano de los versos creados por
todos los poetas a lo largo del tiempo."
Pascual
IZQUIERDO
III CLARIDAD DE LA LUZ
No es nada, es un suspiro,
Pero nunca sació nadie esa
nada
Ni nadie supo nunca de qué
alta roca nace.
Luis
Cernuda
POETAS ZAHAREÑOS
A Pablo
García Baena
Mis
queridos y jóvenes poetas:
el
poeta, poeta, nunca creyó en batallas,
ni
en la lid ni en el sable
para
obtener tiaras o tronos literarios,
tan
ansiados por los ninguneadores,
porque
nunca, jamás, actuó en bandería
ya
que no es humanismo combatir
aliado
junto al medro y la cucaña.
El
poeta del que hablo es un poeta puro,
bardo
sin ambiciones, tan sólo las del éxtasis,
buscador
de palabras de belleza y justicia,
palabras
repujadas o desnudas,
llenas
de claridad y de misterio
porque
todos sus verbos provienen de las aguas
que
manan de Hipocrene,
agua,
espuma de toda poesía
carente
de exclusiones.
Así
es este poeta: el zahareño que vuela libremente
en
un vuelo de altura sin ambición mundana.
Verdadero
poeta de poesía y vida.
¿Alguno
de vosotros lo conoce?
Os
puedo asegurar que sí que existe,
que
yo conozco alguno que otro bardo
con
el perfil descrito.
(Es una rara especie,
si no se la protege será
extinta.)
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EN VERSO, EN PROSA...
Decid:
¿Qué es poesía?
La
vemos, nos alumbra en ocasiones;
pero
nadie ha podido definirla,
describir
el misterio de su magia,
atrapar
lo invisible en lo visible.
¿Cómo
saber la luz que lo imposible crea y
nos abraza?
Es
ella la que toca las palabras,
la
que escribe el poema – en verso, en prosa –
sólo ella es quien alumbra, y nos deslumbra.
¿Habéis leído
a Ashbery?
(Podría hablar de tantos…)
¿Sabéis
que bebió en Auden, Hölderlin,
en
Valèry, Eliot, Whitman,
en
épicos poemas populares…?
No
es ficción el poema, es la pura vivencia
recorriendo
el camino entre la nada
y
el misterio final, nada tal vez.
El
sabor de la luz dentro del verso,
el
olor de la luz en las palabras,
esa
luz que ilumina algunas veces
a
unos cuantos poetas,
eso
es lo que se sueña, que se busca.
La
poesía en prosa
(hace ya tantos años que se escribe:
Novalis, Juan Ramón, Rimbaud,
Cernuda...)
mezcla
la realidad y el sueño, nombra,
trastoca
la verdad en otra nueva
sin
medida ninguna.
(¿Sin medida?
Toda cadencia tiene su medida.)
Mezclar
lo irracional junto a lo cotidiano
¿Es
buscar la medida con pensamiento libre?
No
se limita al verso ni a la estrofa
y
menos al sonido de la rima.
Estas
composiciones, sin murallas,
son
como un campo abierto.
(¿Para alejarse de la mnemotecnia?)
Un
poema, si abraza los sentidos,
si
es capaz de besarnos, de golpearnos,
de
quedarse en nosotros…
es
que tiene el fulgor de lo invisible
y
da igual que ande preso o libre vuele.
En
verso, en prosa, da lo mismo, al cabo,
se
trata de pintar con los sonidos,
de
oler la luz, de ver, nombrar la vida
para
que tome forma y se haga nueva
a
los ojos del tacto, a los oídos
que
miran asombrados y se incendian
con
el fulgor de las palabras viejas,
nuevas,
como
trozos de cielo que conquistan
el
universo entero.
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BUSCAMOS
Escribir un poema y encontrar
en unos pocos versos –tras escritos-
las claves de uno mismo y, sin embargo,
pensar que alguien te dicta esas palabras
que tú nunca pronuncias, que no sabes
y quedar como ausente,
pensando en ese yo que se te muestra;
pero que desconoces,
sucede, ya lo creo que sucede.
Es cierto que sucede, no sé cómo.
Y a veces ese yo que nos creemos
va buscando la dicha que no encuentra
y ciega la distancia entre uno y otro
nos enseña los muros afligidos
de lo que no sabemos.
Buscamos ser felices, sin embargo
casi nunca encontramos la medida
pues es tan invisible
como el yo poliédrico que somos.
Miramos,
mas sin ver.
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LA POÉTICA
La
poética está en lo que se canta.
Se
producen castillos con palabras inútiles
que
no alcanzan las voces
porque
no existen causas que provoquen los pasos
de
crecer construyendo, de aprender observando,
de
escribir lo más vivo que nos nace
de
la necesidad.
Si
eres capaz de ver el alma de los pasos,
de
saber que no sabes y poco lo que ves,
si
libas con el tacto,
con
todos los sentidos, lo más hondo...
Recuerda:
la
eternidad se encuentra
en
aquello de ti que te sucede
y
en aquellos que guardan tu memoria.
Lo
demás es ceniza, barro, polvo,
ese
sueño del hombre que se sueña.
¿Y
cual es la poética,
cómo
explica el sentido de los versos,
el
misterio del agua de la vida?
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POETAS
Si
pensáis que el poeta,
que
escribe lo que vive aunque lo finja
como
una realidad imaginada,
necesita
algo más que poesía...
¡Mis
jóvenes poetas!
Lo
normal es que andéis como perdidos
en
esa oscuridad que trae la duda
y
el instante parezca un laberinto
de
enredados caminos en el hilo
de
todas las incógnitas.
Normal
es que, sin armas, afrontéis la batalla,
sólo
siendo vosotros.
Normal
es que busquéis dónde nace el poema,
la
raíz que alimenta, con su savia,
la
palabra del árbol que ha crecido en el tiempo.
Eso
parece lo normal, sin duda.
Después
vendrán los ecos o vendrán los olvidos
(Esto es algo que ocurre en cualquier andadura.)
Mas,
si acaso pensáis,
si
pensáis que el poeta,
que
escribe lo que vive aunque lo finja
como
una realidad imaginada,
necesita
algo más que poesía...
nunca
seréis poetas.
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ELLA
Para
Ana
Os
podría hablar de ella,
(la diosa con quien sueño.)
La
mujer que persigo para hallar su mirada
y
tener su sonrisa, para oír el susurro
de
su voz en mi voz.
Os
podría decir: yo sé que ella me ama,
y
no es del todo cierto.
En
alguna ocasión sé que me ha sonreído,
que
sus ojos me hablaban con palabras de
luz.
He sentido que, mía, era en algún instante.
La
he tenido en mis manos abrazando la página
y
he sentido su aliento;
pero
sé que también, al momento ha volado
y
he vivido su ausencia
y
he llorado su ausencia
y
he buscado de nuevo su sonrisa y sus
ojos
porque ya, desde crío, perseguía su amor
y
aunque me quiere, a veces,
yo
sé bien que este sueño de que sea sólo
mía
es
empeño imposible
pues
su amor es tan puro que lo ofrece en
relámpagos
como
fuego de vida que alumbrara mil trochas.
Aun
así, soy feliz sintiendo que a mi lado
se
queda algunas veces.
Ella
es luz e ilumina cuando quiere a quien
quiere
porque
sabe muy bien a quien es necesaria.
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SÓLO ES ELLA QUIEN DECIDE
La
vanidad extrema, la ambición,
por
más que se disfracen, siempre acaban
mostrándonos
su cara más oculta,
delatándose
solas, derrocando
en
espejos, en ríos, en la arena,
todo
aquello que, falso, es espejismo
y
nace por afán y sin destino
pues
carece de amor por la palabra
y
va, sin vocación,
perfecta
o imperfecta, a su conquista.
No
puede desdeñarse lo importante,
se
crea o no se crea:
sólo
es la poesía quien decide
y
por más que se quiera dominar
no
habrá fulgor en la palabra escrita
si
no llega y alumbra ese relámpago
que,
a veces, nos regala.
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PALABRAS
Aire de luces cálidas.
Tiempo de luz intenso.
Lluvia de luz que apaga
esas desolaciones tan ajenas,
ese dolor extraño.
¿Qué palabras son
ésas, que nos brotan
como una primavera e iluminan?
¿Quién es el que nos dicta
las palabras que son como relámpagos
y alejan el invierno de las sienes?
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AL
SON DE LAS PALABRAS
Para Carmina Casala
Mostrar
con las palabras toda la magnitud de
los milagros.
Sugerir
lo sencillo con la esencialidad de lo
más hondo.
¿Esta
es la misteriosa claridad?
La
erudición se nutre de los pueblos
y
lava las palabras que, ya limpias,
profesan
en los pueblos extrañeza y asombro,
admiración
y culto.
¿Necesitan
los pueblos escaleras
para
alcanzar lenguajes depurados?
Todos
los pueblos saben que al son de las palabras,
de
las suyas, arranca la emoción
y
vive, y siente, y llora y canta vida.
¿Sólo
los iniciados
pueden
entrar en el recinto mágico
de
lenguajes y brumas?
Las
imágenes son como relámpagos que
alumbran los sentidos.
Llegan
con las palabras
¿La
sencillez difícil de la palabra viva
tiene
la claridad del verbo?
No
sé, no sé…
El
milagro es aquella que nos besa sin más explicaciones.
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CON LA PALABRA AMOR
Para Ana María Navales in memoriam
Si
no es con el amor no habrá deslumbramiento.
Escribir
con amor
es
arder en palabras que revelan la luz,
incendiarse
en su llama de presente continuo.
Hoy es siempre todavía.
Con
la palabra amor, buscad relámpagos,
escribidla
en su luz.
Escribir
con amor es atrapar el tiempo,
llegar,
al todavía del futuro, alumbrando el
instante,
crecer,
crecer, crecer,
iluminar
la casa de la memoria,
la
de los sueños,
la
del olvido.
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SÓLO
EL AMOR NOS SALVA
Para Antonio Gala
I
Sólo el amor nos salva.
Sin amor
anda perdido el eco de
la vida.
Sólo la luz alumbra.
Sin la luz
oscuras, las palabras,
desvanecen.
II
Junto al amor, la luz
y entre la luz, la sombra.
Es la luz el amor
cuando la luz lo nombra.
Cuando le falta luz,
el amor es la sombra.
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PÁJAROS LIBRES, SALVOS
Muchachos:
poned la ética en la estética.
Dejad
el vacío de las voces sombra,
caminad
hacia el misterio de la luz,
pájaros
libres, salvos.
Escribir
es amar y vivir un milagro.
Vida,
amor: Qué precisas palabras.
La
magia de las dos, como en tantos poemas,
vive en lo que se callan.
Miraos
bien por dentro…
y
haced vuestro camino en libertad.
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CONTRADICCIÓN
Y DUDA
Para Enrique Gracia Trinidad
Comprobaréis,
amigos, que la contradicción
–que
forma parte de la vida misma–
también está en los versos que os escribo,
en las mismas palabras
que os pueden sugerir
caminos diferentes.
¿Quién no se
contradice?
Un
amigo, poeta
escribió
hace ya tiempo,
no
sin razón, ternura e ironía:
La
duda tiene nombre de mujer
con
ojos tristes,
es
hija de la luz y los espejos,
(…)
Es
para odiarla…
pero
la quiero tanto…
¿Quién no se contradice?
¡Ay del que esté seguro!
La duda forma parte de
la vida,
y la contradicción,
y cada día, en ellas,
siempre es nuevo.
Manuel López Azorín
Sección III del libro Solo la luz alumbra (2010)
Nota: Poemas de la sección III de Sólo la luz alumbra.
En otra entrada publicare la sección IV
y la V y última de Solo la luz alumbra
En otra entrada publicare la sección IV
y la V y última de Solo la luz alumbra
2 comentarios:
Grandes, hermosos, perdurables...Un abrazo.
Muchas gracias,amigo Yusta, por tus palabras de aliento.
Un abrazo
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